En su definición más básica intraemprendimiento es emprender dentro de una organización.
El término intrapreneurship se refiere a un sistema que permite actuar como emprendedor dentro de una empresa. El intraemprendimiento, entonces, es la creación de nuevos negocios o proyectos que buscan innovar y generar valor añadido. Sin embargo, hay mucho más y en este artículo, desde BIPLAZA, vamos a ahondar la temática desde diferentes perspectivas.
Para comenzar, hablemos de los diferentes enfoques que tiene el intraemprendimiento, según el primer estadio u origen en el que se da. Es decir, si partimos como profesionales autónomos, emprendedores o empresarios.
Y es que a menudo, los términos «autónomo» y «emprendedor» se utilizan indistintamente, pero en realidad se refieren a dos conceptos diferentes.
El autónomo
Es una persona que trabaja por cuenta propia, muchas veces sin tener empleados y sin constituir una estructura empresarial formal. Los autónomos suelen ofrecer servicios o productos específicos, y suelen ser responsables de todas las actividades relacionadas con su negocio, desde la generación de ingresos hasta la administración y la contabilidad.
Aunque la figura del autónomo puede parecer limitante, también es posible intraemprender y encontrar nuevas oportunidades de negocio dentro de su propia actividad. Lo importante es identificar las oportunidades y tener una mentalidad emprendedora y creativa para llevarlas a cabo con éxito.
El emprendedor
Persona que crea un negocio o empresa desde cero, con la intención de crecer y desarrollar una idea innovadora que pueda generar beneficios y tener un impacto en el mercado.
La principal diferencia entre un autónomo y un emprendedor es la dimensión empresarial. Mientras que un autónomo se enfoca en desarrollar su actividad por cuenta propia, un emprendedor busca crear una empresa que pueda generar valor añadido para la sociedad y el mercado.
Si eres autónomo, las claves para intraemprender dentro de tu propia actividad pasan por:
- Diversificar la oferta. Esto implica identificar nuevas oportunidades de negocio y desarrollar nuevos productos o servicios para satisfacer las necesidades de tus clientes.
- Optimizar la eficiencia operativa al identificar áreas de mejora en tus procesos internos, implementando nuevas tecnologías o automatizándolos para reducir costes y aumentar la eficiencia.
- Identificar nuevos mercados y desarrollar estrategias de expansión para ingresar en ellos.
- Desarrollar nuevas alianzas estratégicas con empresas que complementen tu oferta de productos o servicios de tu empresa para ampliar el alcance de tu negocio.
Beneficios del intraemprendimiento en el paso de autónomo a sociedad.
En este contexto, el paso de autónomo a empresa es un proceso importante que puede permitir a un intraemprendedor ampliar el alcance de su idea de negocio y acceder a nuevas oportunidades de crecimiento.
Es por ello que crear una sociedad puede tener una serie de beneficios, entre los que destacamos:
- Responsabilidad limitada: Una de las ventajas más importantes de constituir una sociedad es que la responsabilidad de los socios está limitada al capital aportado. Esto significa que en caso de pérdidas o deudas, los socios no responderán con su patrimonio personal, sino que solo estarán comprometidos con su inversión en la sociedad.
- Acceso a financiación: Al constituir una sociedad, es posible acceder a financiación y a otras formas de inversión que no están disponibles para los autónomos. Por ejemplo, las sociedades pueden emitir acciones o solicitar préstamos bancarios, lo que les permite tener una mayor capacidad financiera para desarrollar su actividad.
- Venta acciones o participaciones de tu sociedad de cara a introducir nuevos socios clave que puedan complementar tus conocimientos o, simplemente, socios capitalistas que te ofrezcan estabilidad financiera.
- Mayor profesionalidad: El paso de autónomo a sociedad puede dar una imagen más profesional y estable a los clientes y proveedores. La constitución de una sociedad puede implicar una estructura de gestión más clara y definida, lo que a su vez puede generar confianza y credibilidad en el mercado.
- Mejora en la gestión: La constitución de una sociedad puede implicar una mayor especialización y distribución de tareas entre los socios y los empleados, lo que puede permitir una gestión más eficiente y efectiva del negocio. Además, es posible implementar sistemas de control y seguimiento más rigurosos, lo que a su vez puede mejorar la toma de decisiones.
- Posibilidad de crecimiento: Al contar con una estructura más sólida y financiera, desde una sociedad es posible acceder a nuevos mercados, ampliar la cartera de productos y servicios, y generar más empleo y beneficios para los socios.
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Intraemprendimiento: Cómo pasar de autónomo a empresa.
Hay que tener en cuenta que el cambio de estatus de autónomo a empresa tiene importantes implicaciones fiscales, laborales, jurídicas y contables.
Antes de tomar esta decisión, desde BIPLAZA nos encargamos de acompañar a los intraemprendedores en la evaluación y análisis de su situación financiera y su capacidad para asumir los riesgos y las responsabilidades asociados con la empresa:
Desde un punto de vista jurídico.
Debes tener claro que la constitución de una sociedad implica la creación de una persona jurídica distinta de ti como persona física. Es decir, tu sociedad tendrá personalidad jurídica propia y, por tanto, podrá contratar, adquirir bienes y derechos, y asumir obligaciones y responsabilidades.
Debes elegir el tipo de forma jurídica que mejor se adapte a tus necesidades ya que, en España, existen diferentes tipos de sociedades, como la sociedad limitada, la sociedad anónima o la sociedad de responsabilidad limitada.
Tendrás que llevar a cabo una serie de trámites para la constitución de la sociedad:
- La elección de una denominación social y su registro ante en el Registro Mercantil Central para la obtención de un certificado de denominación social.
- La redacción de los estatutos sociales, en los que tener en cuenta posibles pactos de socios que hayas firmado anteriormente.
- La determinación del tipo de órgano de gobierno y representación: administrador único, solidarios, mancomunados,…
- El acudir a tu entidad bancaria para la creación de una cuenta corriente de sociedad en constitución en la que proceder a ingresar el capital inicial que hayas determinado (desde un mínimo de 3.000 € ) con la obtención de un certificado de aportación dineraria en el que se tenga en cuenta el % de participación de cada socio.
- El analizar si vas a aportar activos con los que ya cuentes en tu actividad como autónomo (equipos informáticos, vehículos, inmuebles,…) y confeccionar un inventario de elementos especificando marca, modelo y valor actual de mercado.
- Dar forma a la escritura de constitución, teniendo en cuenta todo lo anterior y aportando los documentos anteriores, para acudir a la notaría que elijas y proceder a la firma del documento constitutivo que posteriormente habrá de ser inscrito en el Registro Mercantil de tu provincia.
La eAdministración Pública puede desempeñar un papel importante en el intraemprendimiento desde el comienzo a través de Tramitación digital.
Los Puntos de Atención al Emprendedor (PAE) facilitan la creación de nuevas empresas, el inicio de su actividad y su desarrollo, a través de la prestación de servicios de información, tramitación de documentación, asesoramiento, formación y apoyo a la financiación empresarial de manera telemática. En BIPLAZA, como PAE Privado, podemos ayudarte.
Desde el punto de vista fiscal.
El primer punto a analizar es el beneficio anual de tu actividad, para comprobar si te compensa el pasar a tributar en Impuesto de Sociedades o mantener tu actividad personal como autónomo.
Además habrás de tener en cuenta la confección y presentación de modelos fiscales adicionales estatales y autonómicos para el caso de las Islas Canarias.
A nivel estatal ante la Agencia Tributaria Estatal (AEAT), modelos relacionados con la operaciones vinculadas que puedan darse entre los socios y la propia empresa, pago fraccionado del impuesto de sociedades,…
A nivel autonómico ante la Agencia Tributaria Canaria, los correspondientes al Régimen Económico y Fiscal de Canarias.
Y, en todo caso, tendrás la obligación anual de confeccionar y presentar el Impuesto sobre Sociedades para proceder a su depósito en el Registro Mercantil.
Desde un punto de vista laboral.
Si decides constituir una empresa y aún no has contratado empleados, tendrás que cumplir con una serie de requisitos laborales:
- Solicitar un código de cuenta de cotización
- Dar de alta un centro de trabajo al que adscribir a las personas que decidas contratar
- Analizar los costes de contratación en función del convenio aplicable a su actividad y los perfiles a contratar
- Analizar opciones de cara a la confección de los contratos de trabajo
- Registrar los contratos en el registro laboral
- Pagar los salarios y las cotizaciones a la Seguridad Social
- Contratar un servicio de prevención
- Analizar posibles seguros obligatorios a contratar en función de tu actividad y el convenio aplicable,…
Desde un punto de vista contable.
Como empresa deberás llevar una contabilidad ordenada de doble partida, adecuada a la actividad de tu empresa y que refleje la imagen fiel de tu situación económica. Para ello, tendrás que llevar una serie de libros contables, como el libro diario, el libro mayor y el libro de inventario y cuentas anuales.
Desde el punto de vista económico.
Tendrás que asumir un incremento de costes de mantenimiento como los derivados de la contratación de los servicios de una asesoría en materia contable, fiscal y laboral; software contable y de gestión; seguros; tasas y honorarios que derivan de la presentación de cuentas y modelos fiscales,…
Para ello, es importante contar con expertos en desarrollo de negocio a la hora de marcar una ruta adecuada. Y es importante hacerlo de manera cuidadosa y planificada, para asegurar que la empresa tenga una base sólida para crecer y tener éxito en el futuro.
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Proceso de intraemprendimiento: ventajas, desventajas y soluciones de cada etapa.
Cuando hablamos de intraemprendimiento dentro de una empresa, si aplicamos la metodología Lean y sus claves de desarrollo, podríamos distinguir las siguientes etapas :
Generación de ideas: En esta fase, se busca identificar oportunidades de negocio y generar ideas innovadoras que puedan ser desarrolladas, contando con recursos y apoyo de la empresa durante su etapa inicial.
DESVENTAJAS: El proceso de generación de ideas puede requerir una gran cantidad de recursos, como tiempo, dinero y personal capacitado, así como competir con las prioridades dentro de la empresa. Además puede haber falta de acceso a la información, lo que puede limitar la capacidad para generar ideas viables y relevantes.
SOLUCIÓN: Aplicar la innovación compartida y contar con la experiencia y conocimiento especializado en materia de análisis de mercado, viabilidad y feedback constructivo en el día a día del negocio.
Desarrollo y validación del concepto: Una vez identificada una idea, se procede a desarrollar un plan de acción y validar su viabilidad en el mercado, a través de pruebas piloto y análisis de datos.
DESVENTAJAS: El desarrollo y validación de un concepto es una parte crítica del proceso de intraemprendimiento, ya que permite a los emprendedores internos llevar sus ideas a la realidad, pero obtener los recursos necesarios para llevarlo a cabo puede ser incierto, costoso
SOLUCIÓN: Tomar decisiones de negocio informadas y estratégicas contando con un plan de negocio para mitigar la incertidumbre.
Desarrollo del modelo de negocio: Una vez validada la idea, se debe desarrollar un modelo de negocio sostenible y escalable, que permita generar ingresos y crecer en el mercado. Para ello, se deben definir los canales de venta, los segmentos de clientes, las fuentes de ingresos, los costes y los recursos necesarios para llevar a cabo el proyecto.
DESVENTAJAS: El desarrollo de un modelo de negocio sólido y escalable puede ser un proceso complejo que, si no se desarrolla adecuadamente, la empresa puede tener dificultades para generar ingresos y crecer. Además, si no existe una diferenciación con respecto a la competencia, se corre el riesgo de ofrecer productos o servicios similares a los ya existentes dentro del mercado, lo que afectará a la competitividad.
SOLUCIÓN: Es importante que la empresa realice un análisis detallado del mercado, identificando a sus competidores, sus fortalezas y debilidades, y las necesidades y deseos de sus clientes potenciales. También adoptar un enfoque de prueba-error, ajustando el modelo de negocio en función de los resultados obtenidos.
Implementación y escalado: Si se ha demostrado la viabilidad del concepto, se procede a implementarlo y escalarlo en la organización, buscando generar valor y rentabilidad para la empresa.
DESVENTAJAS: Para un intraemprendedor puede presentar algunas desventajas como pueden ser la falta de recursos, apoyos y derivar en problemas de coordinación efectiva
SOLUCIÓN: Implementar y escalar una idea de manera efectiva y rentable requiere planificación estratégica, gestión de riesgos, análisis financiero, identificación de oportunidades de mercado y asesoramiento tecnológico.
Aprendizaje y mejora continua: Finalmente, es importante aprender de los resultados obtenidos y mejorar continuamente el proyecto. Para ello, se deben realizar mediciones y análisis de los resultados, y utilizar la retroalimentación obtenida para ajustar y mejorar el proyecto en futuras iteraciones.
DESVENTAJAS: El proceso de aprendizaje y mejora continua puede requerir una inversión significativa de tiempo y recursos. Además, la empresa puede encontrar resistencia interna o externa al cambio, lo que puede dificultar la implementación de las mejoras necesarias.
SOLUCIÓN: La empresa debe tener una cultura de aprendizaje continuo y esté dispuesta a invertir recursos en la mejora constante del proyecto. Es importante asegurarnos que las mediciones y análisis de los resultados sean precisos y completos, y que se utilice la retroalimentación obtenida para tomar decisiones informadas para hacer ajustes y mejoras.
El proceso del intraemprendimiento dentro de tu empresa.
El proceso intraemprendedor comienza con una idea nueva o una innovación, y sigue con los pasos de desarrollo, aplicación y modificación.
Pero para prosperar en el volátil entorno empresarial actual, es necesario que te cuestiones sistemáticamente los supuestos, identifiques las oportunidades y generes enfoques alternativos.
Sobre estas premisas, cabe preguntarse:
- ¿Promuevo en mi empresa una cultura de intraemprendimiento que incentive al equipo a generar ideas y proyectos, apoyándoles en su desarrollo y ejecución?
- ¿Tengo implementado algún sistema para la identificación de oportunidades y áreas de la empresa en la que se puedan implementar mejoras o generar nuevas oportunidades de negocio?
- ¿Tenemos detectados los puntos ciegos asociados a la inercia o al éxito para ver las oportunidades a través de una lente diferente?
- ¿Qué estructuras y procesos organizativos tenemos para generar un crecimiento sostenible y validar las ideas de proyectos?
- ¿Cómo podemos ser más ágiles y eficaces?
- ¿Sufro en mi empresa de parálisis por análisis?
- ¿Tengo algún sistema de implementación de proyectos y seguimiento de su evolución para utilizar la retroalimentación obtenida y realizar los ajustes necesarios?
El «Principio de Pareto» o la «Regla del 80/20», establece que el 80% de los efectos provienen del 20% de las causas.
Si aplicamos esta regla al contexto empresarial del intraemprendimiento, podría decirse que en una organización el 20% de los empleados generan el 80% de las innovaciones.
¿Por qué? Porque ese 20% siente curiosidad y pasión por mejorar su entorno. ¿Cómo vas a detectar y fomentar en tu equipo a los profesionales que se atreven a buscar soluciones, dar alternativas y ofrecer respuestas?
La importancia de crear una cultura intraemprendedora en tu organización
En primer lugar, dado que cultura significa muchas cosas distintas para cada persona, establezcamos una definición práctica: La cultura dentro de una empresa es como un «sistema operativo».
O dicho de forma más sencilla: «La cultura empresarial es cómo hacemos las cosas por aquí…«.
Cuando hablamos de cultura empresarial o cultura corporativa la visión suele ser bastante mecanicista dentro de la organización, aunque el verdadero trabajo de cultura con las organizaciones empieza por el individuo.
La cultura es un asunto personal. Y en lo que se refiere al intraemprendimiento cultural es aún más personal pues depende de cada individuo dar forma a la cultura de la organización.
Con este fin, he aquí 5 principios clave para fomentar el intraemprendimiento desde la propia cultura de la empresa:
#1 Las organizaciones impulsadas por un propósito obtienen mejores resultados.
Hoy en día, las fronteras entre propósito, cultura organizativa y marca empiezan a difuminarse.
Un propósito claro para la organización proporciona a los empleados, los clientes y el público una dirección y una identidad comunes. El propósito sirve como ancla atemporal y principio rector para la toma de decisiones organizativas a todos los niveles.
#2 Los individuos necesitan nuevas capacidades para triunfar en el futuro.
Para atraer y retener a los mejores, tendrás que ofrecerles la oportunidad de hacer algo que les apoye en su misión. Si quieres que tu equipo se centre realmente en el cliente, tienes que centrarte primero en ellos: al fin y al cabo, son los principales prescriptores de tu organización.
#3 Los equipos necesitan seguridad psicológica para rendir al máximo.
En un estudio que realizó Google, denominado Proyecto Aristóteles y diseñado para identificar qué hace que un equipo tenga un alto rendimiento, se descubrió que quién estaba en un equipo importaba menos que cómo interactuaban con los restantes miembros, cómo estructuraban su trabajo y cómo veían sus contribuciones.
Y se definieron 5 rasgos fundamentales para que un equipo alcance todo su potencial:
- Propósito claro.
- Cultura de compromiso.
- Funciones y responsabilidades claras.
- Capacidad de contribución personal.
- Y lo más importante, Seguridad psicológica. La seguridad psicológica consiste en sentirse bien compartiendo toda la autenticidad de uno mismo. Es sentirse visto y respetado, tener la capacidad de hablar y compartir, y saber que lo que una persona diga o aporte no será retenido ni utilizado en su contra.
#4 Se necesitan nuevas competencias culturales para que las ideas se materialicen.
Si deseas prosperar en el futuro, la innovación no puede ser un hecho aislado. No se trata de un nuevo modelo de negocio o un nuevo producto. Se trata de mejorar continuamente todo lo que se hace. Para ello se necesitan nuevas competencias a nivel individual, de equipo y de organización.
Las organizaciones, los equipos y los individuos necesitan espacios para que entre nueva información y trabajar dentro de equipos que sean capaces de subir de nivel las ideas de los demás y explorar juntos su viabilidad.
#5 Las estructuras de gestión deben adaptarse al futuro de las organizaciones.
Al igual que las empresas actuales tienen un aspecto muy diferente al de la época preindustrial, el futuro de las empresas ya es distinto al del siglo pasado. Con la digitalización llegan nuevas formas de operar y nuevas oportunidades. Esto también significa que se necesitan nuevas estructuras:
- Nuevas formas de presupuestar.
- Nuevos modelos de remuneración y prestaciones.
- Nuevos modelos para integrar soluciones de valor para el cliente en la actividad principal existente y en los servicios compartidos.
- Nuevas matrices de toma de decisiones.
- Nuevos modelos de colaboración y participación.
Cómo beneficia el intraemprendimiento a una organización.
En las organizaciones consolidadas existe una tendencia natural a preservar el statu quo. Esto es comprensible, porque el cambio puede resultar amenazador. Sin embargo, cualquier organización que no cambie no se adaptará a las nuevas demandas y amenazas del entorno.
Esto se conoce como «darwinismo organizativo» porque las organizaciones que no responden a los cambios del entorno no sobreviven.
El intraemprendimiento hace posible el crecimiento haciendo que el cambio sea aceptable. Sin él, las organizaciones entrarán invariablemente en declive con el tiempo.
Hasta aquí, hemos hecho un repaso al intraemprendimiento, desde la idoneidad de crear una empresa para que las ideas de negocio adquieran otra dimensión, pasando por las diferentes fases, hasta la necesidad de crear una cultura intraemprendedora para tu organización.
Pero si necesitas más información o que nuestro equipo de expertos te acompañe para dar el primer paso, por favor, ponte en contacto con nosotros y cuéntanos tu idea de negocio.
Te invitamos a ponerte en contacto con nosotros para que podemos acompañarte en el proceso de establecimiento de tu organización. Estaremos encantados aportarte toda nuestra experiencia para que puedas lograrlo optimizando tu tiempo e inversión.
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